MILAGROS EUCARÍSTICOS

El 12 de octubre de 2013, S.E. Mons. Alejo Zavala Castro, Obispo de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, ha anunciado mediante una Carta pastoral el reconocimiento del Milagro Eucarístico que tuvo lugar en Tixtla el 21 de octubre de 2006. En la Carta se puede leer:

“Esta manifestación nos lleva a un maravilloso signo del amor de Dios que confirma la presencia Real de Jesús en la Eucaristía… En mi papel de Obispo de la Diócesis reconozco el carácter sobrenatural de la serie de acontecimientos descubiertos en la Hostia Sangrante de Tixtla… Declaro el caso como un “Signo Divino …”.

El 21 de octubre de 2006, se observó que de una Hostia consagrada fluía una sustancia rojiza durante la Celebración Eucarística de Tixtla, perteneciente a la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa.

El Obispo local, Monseñor Alejo Zavala Castro, convocó una Comisión Teológica de investigación y, en el mes de octubre de 2009, invitó al Dr. Ricardo Castañón Gómez a que se hiciera cargo de la dirección del programa de investigación cuya finalidad era precisamente aclarar dicho acontecimiento.

Las autoridades eclesiásticas mexicanas acudieron al Dr. Castañón Gómez porque estaban al corriente de que en los años 1999-2006 el científico había realizado estudios sobre dos Hostias consagradas que también habían sangrado en la Parroquia de Santa María de Buenos Aires.

El caso mexicano comenzó en el mes de octubre de 2006 cuando el padre Leopoldo Roque, párroco de la Parroquia de San Martín de Tours, invitó al padre Raymundo Reyna Esteban a dirigir un retiro espiritual para sus parroquianos.

Mientras el padre Leopoldo y otro sacerdote estaban dando la Comunión, con la ayuda de una religiosa que se encontraba a la izquierda del padre Raymundo, ésta se dirigió hacia él con la “píxide” que contenía las Partículas Sagradas mirando al padre con los ojos llenos de lágrimas, un acontecimiento que enseguida llamó la atención del celebrante:

La Hostia que había cogido para dar la Comunión a una parroquiana había empezado a desprender una sustancia rojiza.

Las investigaciones científicas realizadas entre el mes de octubre de 2009 y el mismo mes de 2012 llegaron a las siguientes conclusiones que se presentaron el día 25 de mayo de 2013 durante un Simposio internacional de la Diócesis de Chilpancingo, con ocasión del Año de la Fe y que ha contado con la participación de miles de personas procedentes de cuatro Continentes:

  1. La sustancia rojiza analizada corresponde a sangre en la que hay hemoglobina y ADN de origen humano.
  2. Dos estudios realizados por eminentes expertos forenses con metodologías distintas han demostrado que la sustancia procede del interior, excluyendo la hipótesis de que alguien pueda haberla colocado desde el exterior.
  1. El tipo de sangre es AB, similar al hallado en la Hostia de Lanciano y en la Sábana Santa de Turín.

Un análisis microscópico de amplificación y penetración desvela que la parte superior de la sangre está coagulada desde el mes de octubre de 2006. Sin embargo las capas subyacentes internas revelan, en el mes de febrero de 2010, la presencia de sangre fresca.

  1. También se han hallado glóbulos blancos intactos, glóbulos rojos, macrófagos en acción que fagocitan lípidos.

El tejido en cuestión resulta desgarrado y con mecanismos de recuperación, exactamente como ocurre en un tejido vivo.

  1. Un análisis histopatológico posterior determina la presencia de estructuras proteicas en estado de deterioro, sugiriendo células mesenquimáticas, células muy especiales, caracterizadas por un elevado dinamismo biofisiológico.

7.Los estudios de inmunohistoquímica desvelan que el tejido hallado corresponde al músculo del corazón (Miocardio).

Ante los resultados científicos y las conclusiones a las que ha llegado el comité teológico, el pasado 12 de octubre el Obispo de Chilpancingo, su Eminencia Alejo Zavala Castro, ha anunciado lo siguiente:

– El acontecimiento no tiene una explicación natural.

– No tiene origen paranormal

– No puede imputarse a la manipulación del enemigo.

«La autoridad eclesiástica además ha querido puntualizar que en ámbito católico el Milagro se caracteriza por los siguientes aspectos:

1. Teológico: La intervención proviene de Dios. Es de origen divino.

2. Objetividad: Es evidente la “alteración” de las causas o leyes naturales.

3. Subjetividad: Quien acepta el milagro “reconoce o acepta” con un acto de Fe que el acontecimiento extraordinario proviene de la amorosa Voluntad de Dios.

4. Finalidad: Tiene por finalidad el bien de una persona o de muchas personas».